¿Puedo repartir comida sin un seguro comercial?
¿Mi seguro personal de auto me cubre mientras reparto?
La respuesta es no, y no es por capricho de las aseguradoras. La mayoría de las pólizas personales excluyen explícitamente cualquier actividad comercial, incluyendo los repartos de comida o paquetes. Esto significa que, si tienes un accidente mientras haces entregas, tu seguro puede negarse a pagar, dejándote responsable por los daños.
El seguro personal está diseñado solo para uso privado
Las pólizas personales están pensadas para:
- Manejar al trabajo
- Ir por tus hijos
- Hacer compras
- Usos cotidianos y no lucrativos
Cuando comienzas a usar tu vehículo para generar ingresos, como en repartos, el riesgo aumenta. Por eso, legalmente, ya no se considera uso personal, sino uso comercial.
Las aseguradoras clasifican esto como una actividad totalmente distinta que requiere una póliza distinta.
Los repartos implican un riesgo más alto
Las compañías de seguros saben que los repartidores:
- Manejan más horas
- Conducen en horas pico
- Están más expuestos al tráfico
- Hacen más paradas repentinas
- Entran y salen de estacionamientos constantemente
- Manejan bajo presión de tiempo
Todo esto aumenta la probabilidad de sufrir un accidente.
Por ese mayor riesgo, las aseguradoras no pueden cubrirte con una póliza personal tradicional.
Las pólizas personales tienen exclusiones específicas
En la letra pequeña de tu póliza probablemente aparece algo como:
- “No cubre el uso del vehículo para entrega de bienes o mercancía.”
- “Exclusión de uso comercial.”
- “No cubre actividades de rideshare o delivery.”
Incluso si no estás repartiendo comida, cualquier uso de entrega (flores, paquetes, documentos, etc.) cancela la cobertura.
Esto significa que, si te accidentas durante una entrega:
- No te pagan daños al auto
- No te cubren daños a terceros
- No cubren lesiones
- Podrías perder la póliza por “fraude”
Las apps de delivery ofrecen cobertura limitada
Muchas aplicaciones dicen que “te cubren”, pero esa cobertura:
- Solo aplica cuando estás en camino a recoger o entregar
- No aplica cuando estás esperando pedidos
- No incluye daños a tu propio auto
- No reemplaza la póliza comercial
Por ejemplo:
Uber Eats y DoorDash
- Cubren responsabilidad civil solo durante una entrega activa
- No cubren daños a tu propio vehículo
- No te protegen mientras estás conectado sin pedido
Aquí es donde la mayoría de los repartidores quedan completamente desprotegidos.
Si tienes un accidente, podrías pagar miles de dólares
Sin un seguro adecuado, podrías ser responsable de:
- Reparación de tu auto
- Auto de la otra persona
- Ambulancia
- Hospital
- Daños a propiedad pública
- Multas por no tener seguro válido
- Demandas legales
Las reparaciones por un accidente promedio pueden ir de $5,000 a $25,000, y si hay lesiones, la cifra puede superar los $100,000.
El seguro personal se invalida si mientes sobre el uso del vehículo
Algunas personas intentan ocultar el uso comercial, pero esto puede salir mucho peor:
- La aseguradora puede rechazar el reclamo
- Cancelar tu póliza
- Bloquearte para contratar en el futuro
- Considerarlo fraude
Las compañías pueden ver registros de apps, horarios, y hasta verificar entregas.
Ocultarlo ya no funciona.
¿Qué tipo de seguro sí cubre los repartos?
Para estar legalmente protegido necesitas uno de estos:
A. Póliza comercial de auto
La opción más completa y segura.
B. Endoso o “delivery coverage”
Muchas aseguradoras ahora ofrecen un addon que agrega cobertura comercial solo para repartos.
Es más barato que una póliza comercial completa, pero te protege mientras trabajas.
C. Seguro híbrido para rideshare + delivery
Ideal si haces Uber + Uber Eats o Lyft + DoorDash.
¿Cuánto cuesta el seguro comercial?
El costo depende de:
- Edad del conductor
- Tipo de auto
- Área donde manejas
- Historial de manejo
- Cantidad de horas que manejas
- Tipo de mercancía que entregas
En general, los precios promedian:
Endoso de delivery:
$20–$60 al mes
Póliza comercial completa:
$100–$250 al mes
Considerando el riesgo, es una inversión mínima en comparación con lo que podrías pagar sin cobertura.